José Manuel García: "Los periódicos siguen jugando un papel muy importante"

11.Nov.2011. - AROA.- Por mucho que pase el tiempo, siempre existen entrevistas de las que guardas un recuerdo más amable. Eso es lo que me ocurre a mi con esta entrevista que realicé hace unos meses al periodista José Manuel García.

José Manuel, ha trabajado en diarios como Marca, As y El Correo de Andalucía, y actualmente colabora como columnista en El Confidencial.com. También cuenta con su propio blog, "El butacón del Garci", donde realiza su propia crónica de la actualidad. Aquí os dejo con una entrevista biográfica.

P: ¿Desde cuándo supo que quería dedicarse al periodismo?

R: Desde los 10 años. Siempre se hacen unas preguntas protocolarias que te hacen los vecinos o el pariente que te hace la visita a tu casa o tú que vas a hacer una visita. “¿Tú cuando seas mayor que quieres ser?” Pues yo siempre decía periodista. Cuando estaba en la escuela me gustaba leer mucho y sigo leyendo. El que lee mucho también escribe mucho. En el fondo no es más que una necesidad vital de comunicarse uno, y será eso. Yo tenía una necesidad terrible de comunicarme, de decir cosas y lo mismo que yo he tenido la suerte o el talento o el don de poder expresar lo que siento.

P: ¿Cómo fueron sus inicios?

R: Primero hice mis primeros pinitos en la agencia Efe. Allí me pilló la muerte de Franco. Como sabíamos que ya se iba a morir, en la delegación de Sevilla, hacíamos guardias, y me pilló medio durmiendo sobre una silla a las cuatro de la mañana. No la cubrí, pero estábamos allí recorriendo delegaciones. Después la mili y al Correo de Andalucía directamente. Allí estuve ocho años y paralelamente, porque insisto, se cobraba muy poco, fui corresponsal de varios periódicos, ayudé a montar la delegación de El País en Andalucía con Alfredo Relaño que era el primer delegado que tuvo El País en Andalucía, ahora director de As, tengo una amistad con él.

P: ¿Cómo recuerda aquella época?

R: Fueron años durísimos porque se trabajaba mucho y se cobraba poco y a veces nunca. Tarde, mal y nunca. Pero a la vez fueron muy hermosos en tanto en cuanto aprendí realmente lo que era ser periodista, lo que es un periódico. Senté las bases de todo lo que fui, he sido y soy.

Guardo un buen recuerdo y muchos amigos de aquella época.

P: La mayor parte de su carrera profesional fue en el diario Marca, ¿cómo llegó hasta allí?

R: Un día sustituí al corresponsal del diario Marca en Sevilla, Martín Benito que se iba de vacaciones, e hice un reportaje a Calderón (un futbolista) al que vestí de torero; y por ese reportaje prácticamente me fichó el Marca. En el año 1985 hice el reportaje y en febrero de 1986 aterricé en Madrid.

Enrique Ortego estaba de jefe de equipo y me llamaron para formar parte del equipo de reporteros del diario Marca, que el director era D. Jesús Ramos. Creo que viví los mejores años de Marca de toda su historia.

Yo era un chico que siempre he tenido los bolsillos cargados de ilusiones, cargados de ganas y de vitalidad. Pero la verdad es que no me imaginé aquel día que allí alcanzaría la cumbre de mi carrera. Prácticamente me recorrí todo el mundo: estuve en mundiales, en prácticamente los mejores acontecimientos deportivos del momento.

P: ¿Cuál es el que recuerda con mayor cariño?

R: El que recuerdo con mayor cariño fue el regreso de Maradona al fútbol. Después del mundial de Italia, Maradona decidió no regresar nunca más a Italia, jugaba en el Nápoles, y se quedó en su país. Paralelamente los italianos le castigaron no por doping sino por cocaína, y le metieron una suspensión de dos años. Maradona estuvo un año y medio sin hablar, y la primera entrevista que concedió fue a Marca, o sea, a mí. En Buenos Aires, en su domicilio. Fue una exclusiva mundial. Este fue el momento más especial y el más impactante, pero también recuerdo que hice reportajes muy emotivos, como el que realicé en Serbia durante la Guerra de los Balcanes en 1996.

P: Usted ha trabajado en prensa y televisión, ¿le costó adaptarse al ritmo de la televisión?

R: Pues tuve que aprender una nueva profesión con el instinto innato del periodista que uno lleva y aplicarlo a la realidad. Debías dar una historia de dos folios en un minuto o menos, en cuarenta segundos. Ese aprendizaje es duro, a veces doloroso, pero posible. Siempre los comienzos son duros. Pero ese aprendizaje lo hice con 50 años.

P: Con la llegada de internet, todo ha cambiado, ¿qué piensa acerca de la revolución que viven los medios?

R: Los medios digitales prácticamente se han merendado a la prensa escrita. La prensa escrita de aquí a muy poco va a jugar un papel casi testimonial porque es una ruina el mantenimiento, es muy caro, sin embargo un periódico digital no cuesta tan caro y cuenta más cosas. Y gratis para los usuarios. Robando la frase de Álex de la Iglesia, “Internet no es futuro, ya es presente”. Pero un presente súper rabioso. Hay periódicos digitales que son una maravilla. Para mí un periódico de referencia es el Confidencial.com. En la actualidad los periódicos siguen jugando un papel muy importante. En España, internet está muy arraigado, pero una parte importante de la población sigue comprando el periódico en los quioscos, sobre todo en Andalucía. Todavía la prensa escrita tiene su público, pero cada vez menos. Es claro. Hubo un encuentro de directores de periódicos muy importantes del mundo aquí en Madrid y llegaron más o menos a esa conclusión: lo que hará la prensa escrita será jugar un papel más selectivo, de más calidad. Se dedicará a ciertos sectores.

P: Con todo, ¿cómo ve la profesión en la actualidad?

R: La televisión y determinados programas han denigrado el papel del periodista: la prensa rosa, cierta prensa basura o ciertos programas de televisión basura, han hecho un daño mortal a la profesión. Es reparable, pero se le ha hecho un daño terrible a la bonita y bendita profesión de periodista.

P: Para acabar, cuenta con su pequeño rincón en la web: “El butacón del Garci”, háblenos sobre él.

Lo creé por esa necesidad de decir lo que yo siento y lo que pienso y cómo veo las cosas, y en mi blog El Butacón del Garci, simplemente me limito a expresar lo que pienso y cómo veo la vida. La forma de ver la vida. La necesidad imperiosa de comunicar. Te puedo garantizar que lo hago con absoluta independencia. Me importa un pimiento lo que la gente crea, eso es lo que pienso. Hay un artículo en él que es mi declaración de intenciones. Eso es lo que pienso de la vida y del periodismo.